La medicina alternativa nos ha acompañado por siempre y la naturaleza se ha encargado de mostrarnos sus virtudes. El ajo, fiel acompañante de la cocina, se ha hecho imprescindible con su presencia. Y es que no imaginamos diversas preparaciones sin agregarles ese toque picoso y agradable de este vegetal, que tiene un sabor y un olor inigualable.
El ajo crudo, asado, horneado, en barbacoa, frito, licuado o entero. En bases para aderezos o la versión “al ajillo”. Como se quiera colocar, sólo o mezclado, resulta maravilloso. Y viéndolo así, nuestra salud se está reforzando cada vez que lo consumimos, sin notarlo.
BENEFICIOS DE CONSUMIR AJO
Tomar un diente de ajo en ayunas por las mañanas, o en las noches antes de dormir trae beneficios. Consumirlo crudo es lo recomendado, ya que la Alicina (ingrediente activo) pierde su efecto ante el calor.
Combate y previene enfermedades cardiovasculares. Ayuda cuando hay problemas cardiovasculares o deficiencias venosas.
Reduce los niveles de triglicéridos y colesterol. Esta frecuente afectación se combate consumiendo ajo, sin esperar efectos secundarios.
Baja los niveles de glucosa en sangre. Ideal para todo tipo de diabetes.
Ayuda cuando hay malestares gastrointestinales. Estas molestias causadas por bacterias, hongos, parásitos y cualquier otro, son tratadas con ajo.
Es excelente quemador de grasa corporal. Es una manera natural de combatir las grasas y el sobrepeso.
Acción comprobada en infecciones fúngicas y microbianas. Es un completo tratamiento para las uñas, el cabello y la piel.
Rejuvenece el cuerpo y la piel. Su acción oxigenante, beneficia a todo el cuerpo, rejuveneciendo la piel y devolviéndole la movilidad a músculos y huesos.
Previene la diabetes gestacional. Nadie merece nacer enfermo. El ajo ha mostrado grandes beneficios cuando se evidencia esta diabetes en la mujer embarazada.
Elimina infecciones vaginales. El beneficio anti fúngico y bactericida del ajo, también incluye esta área tan delicada en la mujer.
Disminuye el riesgo de padecer cáncer. Ser un antioxidante natural, contribuye para que no se activen las células cancerígenas.
Cicatrizante. Es aliado en procesos de cicatrización, evitando infecciones y mejorando visiblemente el aspecto de la piel.
Dentro de todas las recomendaciones que se encuentran ante el consumo del ajo crudo, se orienta a no tomarlo si tiene problemas de coagulación, ya que puede ocasionar hemorragias. De igual forma en caso de mostrar alergias, se debe omitir de la dieta.
Otra observación importante, es que debe consumirse por tiempos programados, no prolongar su uso en el tiempo. Será suficiente por 2 o 3 semanas. Y si quiere conocer otras formas naturales para sentirse bien, consulte este enlace “Cultive cúrcuma y descubra sus beneficios”.