Las mermeladas son recetas con mucha historia. En el primer siglo d.c., Marcus Gavius, gastrónomo romano, escribe en su primer libro (De asuntos culinarios) la receta de mermeladas. La intención era la conservación de las frutas y hoy entendemos las razones, por ver que a pesar de los sistemas de refrigeración, la duración de algunas frutas es muy limitada.
La palabra mermelada, se deriva de la frase “confitura de membrillo” y tiene origen portugués. Hoy se le conoce con este nombre en México, España y América del Sur, mientras que en el Caribe y América Central, le dicen Jalea. A pesar de estas diferencias, las recetas y sus presentaciones no varían.
Las bases de estas recetas son las frutas, especialmente con pectina como las manzanas y los frutos rojos exceptuando fresas y zarzamoras. Los azucares o endulzantes de su preferencia y la apertización, como técnica de conservación.
La zanahoria, calabaza y el tomate, son vegetales que también son usados para hacer mermeladas. Y los frutos que no contienen pectinas son suplementados con esta sustancia, o colocándole trozos de mañana o zumo de limón a sus preparaciones.
RECETAS FÁCILES DE MERMELADAS
Mermelada de zanahorias y miel. Lave, pele y ralle 1kg de zanahorias, cúbralas de agua y cocine hasta que ablanden. En otra cacerola de cocción, coloque 800g de azúcar, el zumo de 2 limones, 1 taza de miel y 400ml de agua. Cocine hasta que espese y agregue las zanahorias. Apague, deje enfriar y colóquela en los envases donde la va a conservar.
Mermelada de zarzamoras. Lave y desinfecte 1kg de zarzamoras, escurra y coloque en una olla con 1kg de azúcar y el zumo de 1 limón. Cocine a fuego lento hasta que espese. En este punto, cocine 5 minutos más sin dejar de mover. Retire del fuego, y conserve en envases.
Mermelada de fresas. Lave y trocee 5 tazas de fresas, agregue 3 tazas de azúcar y macere durante la noche. Al día siguiente cocine la mezcla durante 35 minutos, agregue pectina o el zumo de 1 limón 5 minutos antes de apagar. Enfríe y disfrute.
Mermelada de piña. Cuece 2 tazas de piña picadas muy finamente en 1 taza de agua por 20, minutos a fuego bajo. Agregue 2 tazas de azúcar y 2 cucharadas de zumo de limón. Cocine 40 minutos más hasta que esté espeso. Enfríe y conserve.
Todas las técnicas de preparaciones y conservación que realice en su hogar, le darán beneficios, no sólo en su presupuesto, sino en la garantía de consumir productos con gran sabor y calidad nutricional. Vea otros enlaces de interés “siembre sus vegetales”, y siga disfrutando de productos hechos en casa.
