Los hongos, bacterias y virus están dispersos en cualquier parte y son los causantes de las principales enfermedades que se padecen cada día. A pesar de que nuestro sistema inmunitario está al frente, son muchas las razones que lo debilitan, haciendo parecer que estos patógenos son más potentes. Los antibióticos naturales nos pueden ayudar en todo momento.
Las farmacéuticas trabajan duro para ofrecernos los mejores productos y ante cualquier enfermedad, se debe acudir a un especialista quien sabrá qué recomendar. A pesar de ello, los antibióticos naturales nos muestran alternativas baratas, para ayudarnos a sobreponernos en estos momentos donde sólo queremos estar bien.
RAZONES PARA USAR ANTIBIÓTICOS NATURALES
La decisión de utilizar antibióticos naturales depende en gran medida de la amplia efectividad. Mientras que los tratamientos convencionales atienden enfermedades producidas por bacterias, el natural también ataca hongos y virus. Siendo así, se ha considerado con seriedad el uso de productos sin procesos químicos.
Otras suficientes razones para usarlos es que en la medida que curan, fortalecen el sistema inmunitario. No afectan el tracto digestivo, por lo cual no se está propenso a sufrir lesiones gástricas, acidez, diarreas, entre otros.
LOS ANTIBIÓTICOS NATURALES MÁS EFECTIVOS SON
Jengibre. Su consumo fortalece la flora intestinal y el gingerol incrementa el sistema inmunitario. A pesar de no ofrecer un amplio espectro, ha sido bien utilizado en infecciones graves.
Ajo. Es el más potente de los antibióticos. Contiene 70 sustancias con acción fungicida y bactericida. Se puede ingerir o aplicar directamente sobre las heridas de la piel. Es de amplio espectro y se puede tomar crudo, en recetas o en cápsulas.
Aloe vera. Si busca un producto que sea antibacteriano, antibiótico y antiinflamatorio, es el aloe vera. Su ingesta protege el sistema digestivo y su aplicación cutánea ofrece beneficios en la piel, uñas y cabello.
Cebolla. Este vegetal ayuda a eliminar parásitos intestinales, infecciones respiratorias y evita que se propaguen las bacterias ante una infección, gracias a su contenido en azufre.
Aceite del árbol de té. El té en infusión no sólo es una bebida agradable, que puede ingerirse fría o caliente. Estudios han comprobado que el aceite que ofrece este árbol tiene efectos saludables, aunque su consumo no esté indicado por sus altos niveles de toxicidad. Colocado en la piel elimina verrugas e infecciones en heridas y dolencias.
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