Las siembras, jardines y cualquier plantación vegetal que se haga sobre la tierra, necesitan recibir fertilizantes. Si desea sembrar o hacer cualquier cultivo, debe enriquecer la tierra antes de colocar las semillas. Si ya todo está plantado, debe mejorar la calidad de esa superficie para lograr los mayores resultados.
Es común conseguir buenos fertilizantes para sus plantas en cualquier mercado. Existen diversas marcas, presentaciones y concentraciones para usar dependiendo del tipo de plantación. Pero no es necesario comprar, es hora de reutilizar todos los desechos que salen de su cocina, y que cada día generan contaminación y malos olores en los basureros.
REÚNA LOS DESECHOS Y CONVIÉRTALOS EN FERTILIZANTES
La tierra se enriquece entre otras cosas, con los productos que salen de ella. Es por ello que de todo tipo de vegetales, frutas, verduras y desechos en general, se puede producir el mejor fertilizante.
Evalúe cuántas bolsas de desperdicios saca de su cocina. Cada vez que prepara las comidas, debe pelar patatas, zanahorias, remolachas, entre otras, desechando conchas, raíces y partes que no utiliza al cocinar. Luego de comer, son muchos los residuos que quedan en cada plato y que tira a la basura por costumbre, mientras sus plantas los están necesitando.
ELABORE SU FERTILIZANTE
Al tener reunida una buena cantidad de desperdicios, que puede colocar en el congelador diariamente, proceda a elaborar el fertilizante. Si tiene un jardín, puede hacerlo directamente en la tierra. Abra un hueco de unos 40 o 50 centímetros de profundidad y diámetro, coloque una base de la tierra que acaba de remover, y sobre ella, una capa de los desperdicios.
Siga alternando en capas, una de tierra y otra de desperdicios hasta completar el nivel de la superficie. Identifique con unos palitos de madera o plástico esta área abonada. Deje actuar por uno o dos meses, mientras se disuelven los ingredientes.
Al pasar este tiempo, debe mezclar bien esta tierra con todos los desechos y colocar sobre las superficies de las plantaciones. Si no las ha hecho, coloque mezcle tierra con este fertilizante antes de sembrar. Si no tiene un jardín, puede realizar este proceso en un envase plástico o metálico.
En dos meses más, continúe reuniendo todos esos desechos, para que vuelva a realizar este fertilizante. Será una manera de generar menos contaminación y de aprovechar cada recurso a favor del ahorro.
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