El dolor físico es una de las peores sensaciones que se pueden sufrir. A pesar de que diversos estudios indican que es “subjetivo”, no se pondrá en duda lo terrible que se siente cuando duele. El umbral ayuda a definir el nivel de intensidad en cada persona, tanto que se ha escuchado de mujeres que llegan a parir sin padecer.
El otro extremo también existe, donde en la mínima torsión del tobillo ya no se puede ni apoyar el pie. Estos dos extremos están seriamente ligados a ese umbral, que mientras más elevado se tiene, menos malestar se siente y viceversa. Este es el tipo de personas que requieren de las técnicas para manejar esta forma de sentir.
PRACTIQUE SENTIR MENOS DOLOR
La indicación del servicio de salud pública de Reino Unido (NHS) ante el manejo del dolor, incluye lo siguiente:
Hacer ejercicios. No se trata de rutinas pesadas. Sólo nadar, caminar o bailar bloquea esas señales de dolor que llegan al cerebro y benefician al cuerpo entero.
Respirar. La correcta respiración ante la sensación de dolor es necesaria para no hiperventilar. Inhalar y exhalar profundo y despacio, evita sentirse ansioso, mareado y caer en un ataque de pánico.
Cambie su atención. Pensar en algo distinto al dolor le hará mejorar. Puede hacer alguna actividad manual, pintar, tejer o cualquier otra que le haga ignorar lo que siente.
Duerma. Las rutinas le sueño le proveen descanso al cuerpo cuando está padeciendo dolor. No dormir, lo intensifica.
No se aísle. El dolor es una sensación tan desagradable que puede obligarlo a mantenerse aislado. Luche con esa sensación, interactúe y comparta aunque sea por poco tiempo con otras personas.
Infórmese. Cuando el dolor persiste se debe tener toda la información al respecto. Es bueno acudir al médico para que se pueda identificar la causa, solo así podrá atenderse. No deje que su cuerpo continúe padeciendo sin saber qué le ocurre. Vea “Aumente los niveles de serotonina naturalmente”.
